Lobos 24 Un nuevo concepto en información
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En diálogo con LOBOS 24, el vecino Oscar Silvestre León, un artista notable, nos comentó sus proyectos más recientes, y trazó una semblanza de lo que ha sido su oficio por más de 50 años: reducidor de cabezas de animales, único en el mundo.
León comenzó diciendo a este medio, que: “Yo siempre tengo el recuerdo de Enrique Sdrech, que fue mi padrino artístico, un periodista que alcanzó relevancia nacional, y que fue quien me apodó “el jíbaro de las Pampas”. En una de esas charlas, él me comentaba que el tiempo iba a pasar, pero que con lo que hago yo siempre iba a ser noticia. Hace 60 años que me dedico a esto, y creo que sus palabras me dieron aliento para seguir”.
“Mi infancia fue un poco exótica, atípica. No era de tener muchos amigos ni de andar en barra, lo que siempre me atrajo fue el campo, las lagunas, la naturaleza en sí. Tuve un “mini zoológico” en mi casa, y mi madre siempre se enojaba porque en una oportunidad traje un zorro vivo e hizo un desastre en el gallinero que teníamos. Cuando encontraba algún animal enfermo, lo traía y lo curaba. Y el arte que yo hago, de reducción de cabezas, jamás lo practiqué con animales vivos, nunca haría algo así. A veces los encontraba en la ruta o alguien me los llevaba a mi casa, ya sin vida, y entonces hacía mi trabajo”, precisó Oscar.
Añadió que: “El principio de todo fue con un tero, que traje a mi casa y se murió, ahí empecé a practicar la momificación, en la década del ’60. Y allá por 1970, ya dejé de hacer embalsamamiento y me dediqué de lleno a la reducción de cabezas, empleando algunas de las técnicas en las que investigué más algunos reactivos nuevos. Soy un autodidacta, y habiendo pasado tantos años, calculé que me hicieron más de 2.000 notas y entrevistas de medios de Argentina y del Exterior. Yo dediqué toda mi vida a esto, nació en mi infancia. Lo que quedará son las obras y los trabajos que hice. Lo que más les llama la atención a los periodistas, ya sea de acá o de otro lugar del mundo, es que a mí me tocan timbre en mi casa y yo salgo a recibirlos. Así lo he hecho con todos, lo digo humildemente. Me considero un tipo sencillo y abierto: sé lo que hice pero nunca me la creí, no tengo vanidad. Pero es gratificante que te respetes por el trabajo que hacés. Y puedo decir que soy profeta en mi tierra, en Lobos, sobre todo cuando el éxito que puede tener el otro no es aceptado. La primera nota me la hicieron en el diario “En Voz Alta” en 1969, y a partir de ahí no paré”.
Y con respecto a sus trabajos más recientes, hizo saber que: “En 2017, nosotros empezamos un cortometraje con unos periodistas de Buenos Aires, que los producen para distintas agencias de noticias. Cuando se terminó de filmar, en el 2019, fue vista por muchos productores de cine de Capital y surgió la posibilidad de enviar el material a festivales de todo el mundo. Yo en esa película estoy trabajando con la cabeza de un conejo, que ellos querían hacerlo rápido, pero para que el trabajo salga bien demanda unos seis meses. Por eso en algunas partes de Europa no fue aceptada. Luego hubo un festival en Nueva Jersey (EE. UU.), en febrero de este año, y soy el único argentino que participó como protagonista. A su vez, se distribuyó en casi todas las universidades de Estados Unidos. Cuando llegó a Nueva York, empezaron los problemas por la pandemia del Coronavirus y se suspendieron los festivales con público. Lo bueno es que la película ya está subida a Internet, y seguramente tendrá mayor trascendencia”.
“El film fue muy elogiado, por la dedicación que le pusieron los realizadores, y muchos les preguntaron si yo todavía vivía, porque hace 50 años que me dedico a esto, sobre todo por la difusión que me dio la BBC en su momento. Por eso, te digo que gracias a la prensa, lo que yo hago se pudo conocer en todo el mundo. Yo estaba invitado a viajar a EE. UU. cuando se abrió el festival, pero por los motivos que te comenté no pude hacerlo, quizás sea el año próximo. Hay países como la India o Israel donde yo pensaba que esto no iba a llegar, y fue un éxito”, puntualizó León.
Para concluir, enfatizó que: “La película se llama “El reducidor”, y será ternada al mejor cortometraje del festival. Qué te puedo decir, con eso ya me considero ganador. Y te anticipo algo, para el año que viene tengo previsto hacer una muestra acá en Lobos en conjunto con la Peña «Papa Francisco», que va a contar con la presencia de los cineastas y de una modelo que hará un desfile. Va a ser lo último que haga, al menos lo que tengo pensado hasta ahora”.
