Lobos 24 Un nuevo concepto en información
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ALCO (Asociación de Lucha contra la Obesidad), cumplió 40 años de presencia ininterrumpida en Lobos, y sus integrantes lo celebraron compartiendo una merienda. El encuentro de este sábado fue muy emotivo, no sólo por este aniversario, sino por todo lo que han logrado quienes componen el grupo. Por supuesto, a ALCO pueden concurrir y participar personas de ambos sexos, si bien por lo general la mayoría -al menos aquí en Lobos- son mujeres.
Rosa Plácido, referente de estas cuatro décadas, se refirió en primer lugar al recambio que se producirá entre los distintos roles que existen: Miriam es la referente nuestra en actividad física, Adriana y Mirta son las que tomarán la posta del grupo se convertirán en responsables del mismo a partir de septiembre. (Se preservan los apellidos para mantener el anonimato, aunque aceptaron que la prensa sacara fotos para ilustrar esta nota).
Dijo Plácido a LOBOS 24, que: “El paso principal es reconocer a la obesidad como una enfermedad si bien es crónica, se puede tratar, para mejorar la calidad de vida. Estos días he estado un poco sensible pensando en los 40 años, porque ha pasado mucha gente por el grupo, algunos no permanecieron, pero siempre han aprovechado el acompañamiento del resto para sentirse mejor. Hay muchas chicas que van y vienen, pero es normal, están quienes concurren desde los comienzos y aquellas que se sumaron más tarde y actualmente no continúan. La premisa que tenemos es que cuanto más participemos, apoyándonos en la literatura del Dr. Cormillot, más cerca estamos de lograr el objetivo. Hay que tener un plan para bajar de peso basado en la actividad física, y estar dentro del grupo es un gran sostén para todas las que lo integramos. Nunca imaginamos que íbamos a celebrar 40 años. Pasó la pandemia, y durante ese tiempo estuvimos en contacto virtualmente. Cuando retomamos no teníamos muebles porque en la institución que nos cedió el salón los habían robado, por eso después de esos dos años, te diría que fue empezar de nuevo.
Rememoró que: “El 23 de agosto de 1983 arrancamos en el salón de la Parroquia vieja, donde antes estaba la pizarra. Ese fue el primer grupo de ALCO que se fundó en Lobos, fuimos apadrinados por otros distritos donde ya existía, como el de San Nicolás, así llegaron los tres primeros Coordinadores. La cuestión es que cuando comenzamos, era un grupo numeroso, el salón estaba lleno, no puedo precisar o recordar cuántas éramos. Inclusive, hubo un tiempo en que hacíamos dos reuniones grupales semanales, viernes y sábado. Eso es parte de la historia, y lo bueno es que hoy por hoy, aunque seamos menos, no hemos desaparecido. Nunca hablamos de problemas personales, nos concentramos en nuestra meta, para no mezclar las cosas.
“Después de estar en la Parroquia, pasamos a la sede del Comercial, donde estuvimos muchos años. Luego nos fuimos a la Fundación Lobos, estuvimos también en la Escuela 6, volvimos por un tiempo al Comercial, y más recientemente nos reuníamos en la Escuela 11. Cuando pasó la pandemia, solicitamos permiso para tener nuestros encuentros en la Escuela 1, hicimos las gestiones ante el Consejo Escolar y nos aprobaron la propuesta de trasladarnos acá, donde estamos hasta la actualidad”, puntualizó Rosa.
Remarcaron que el ejercicio más básico y sencillo que se puede hacer, es caminar, así lo expresó Miriam, quien tiene a su cargo la coordinación de la actividad física.
“Hoy vamos a celebrar este cumpleaños con una merienda tranquila y saludable, tenemos la visita que algunas amigas que hace mucho que no venían, y es un momento especial”, comentaron con gran satisfacción Adriana y Mirta.
“Es un lindo reencuentro, que nos lleva a recordar lo vivido en un montón de años, están quienes se incorporaron hace poco y aquellas que tienen más permanencia”, añadió Rosa. Todo el material lo provee la Fundación Cormillot, que fue quien dio origen ALCO. Por ese motivo, para sustentar económicamente este proyecto, cada miembro paga un bono por semana, y bien puede abonar mensualmente el dinero que se necesita para acceder a todo el asesoramiento que se brinda. Cada semana se trabaja sobre un aspecto diferente vinculado a la obesidad, y hay mucha camaradería. Se otorga un gran estímulo a quienes consiguieron bajar de peso en el transcurso de esa semana o ese mes, que constituye un incentivo clave para seguir adelante. Asimismo, explicaron que están proyectando difundir más lo que se hace desde ALCO a través de los medios de comunicación, repartiendo folletería, y replicando el mensaje de que es posible sentirse bien.
“Acá no hay magia. Lo fundamental es trabajar en el bienestar personal, con un plan de alimentación. Ser parte de ALCO, y por ende de la Fundación, es una forma de acceder a todos los consejos y publicaciones que envían los nutricionistas y otros profesionales. Además, podés sentirte identificada con los testimonios de otras personas, todo esto ingresando por Internet. Todos los sábado a las 16 hs. nos encontramos en la Escuela Primaria 1, están invitados todos quienes deseen sumarse, y seguramente cuando llegue el verano cambiaremos el horario y vamos a informarlo a través de los medios”, concluyó Rosa Plácido, una de las fundadoras de aquel agosto de 1983, que continúa participando como el primer día.
