La calcomanía en la luneta trasera es más que elocuente: «Nunca te olvides que yo también fui último modelo», una frase similar a las que emplean las personas de cierta edad cuando dicen «yo también fui joven alguna vez». Raúl Contreras es el orgulloso propietario de este Peugeot 404 que se puede apreciar en las fotos, que por sus características es único en Lobos, y probablemente lo sea en los pueblos de la zona. Su dueño lo compró hace alrededor de 20 años y le fue incorporando todo tipo de accesorios, otorgándole su impronta hasta el mínimo detalle. Es decir que, sin llegar a estar «tunneado» del todo, tiene algunos elementos modernos, como el stereo en reemplazo de la radio que venía de fábrica.
Cabe destacar que su color original era blanco, y este vecino, según su relato, quiso pintarlo de un naranja intenso, casi bermellón. Más allá del cambio de color, la carrocería luce impecable, sin rayones ni nada que se le parezca, tal como si hubiera salido de la concesionaria hace 48 años.
El habitáculo tiene todas las comodidades que el lector se pueda imaginar, el motor está impecable, y es un vehículo con el cual se pueden recorrer largas distancias sin temor a sufrir algún percance mecánico. Contreras comentó a LOBOS 24 que, como es de esperar, desde que compró el Peugeot ha recibido numerosas ofertas para venderlo, pero que las ha rechazado todas, pese a que en algunos casos fue «tentado» con una buena suma de dinero. Dijo asimismo posee un Siam Di Tella en excelentes condiciones (modelo ’67), que decidió dejárselo a uno de sus hijos. En la nota se menciona por error que el Di Tella era de 1975, pero en realidad se trata de la última versión de este popular coche de la clase media argentina, cuya último lanzamiento corresponde a 1967.
Una historia repleta de anécdotas y datos curiosos que nos despertó interés desde el vamos, y que te contamos (resumida) en este video.