Los precios al público de la nafta y el gasoil aumentarán a partir de este viernes alrededor de 1,3% debido a la vigencia de una modificación del Impuesto a los Combustibles (ex ITC o Impuesto a las Transferencias de Combustible), establecida en la reforma tributaria que cambió el esquema de impuestos por el expendio en estaciones de servicio.
Eso determinará un incremento del 1,3% de los precios en surtidores, por lo que el litro de nafta súper subirá unos 40 centavos: pasará a pagarse por encima de los 28 pesos en la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano, y superará los 30 pesos en gran parte del interior del país.
Raúl Castellano, directivo de la Cámara de Empresarios de Combustible de Córdoba (CECC), explicó a Infobae que «el aumento estaba previsto cuando se cambió el impuesto a la transferencia de combustibles por una suma fija, actualizada cada tres meses según costo de vida. Ese período trimestral vence este viernes».
«Entiendo que se aplica directamente, sin necesidad de una resolución en el Boletín Oficial, porque es algo ya fijado con anterioridad. Por lo tanto, no es una decisión de la AFIP, sino que es un aumento que lo establece la ley. Si bien se habló sobre la posibilidad de una suspensión, hasta ahora no hubo ninguna notificación», agregó.
Según la modificación de la Ley 23.966 sobre Impuestos sobre los Combustibles Líquidos y al Dióxido de Carbono, aprobada el 29 de diciembre pasado, los montos fijos del gravamen «se actualizarán por trimestre calendario, sobre la base de las variaciones del Índice de Precios al Consumidor (IPC), que suministre el Instituto Nacional de Estadística y Censos, considerando las variaciones acumuladas de dicho índice desde el mes de enero de 2018, inclusive».
En octubre de 2017 el Ministerio de Energía decidió liberar el precio de los combustibles, para actualizarlo en base a una fórmula que contempla el alza del dólar, el valor internacional del petróleo y el costo del bioetanol. Con la reforma tributaria se fijó una actualización trimestral del ITC. Todos estos componentes definen el precio del combustible en surtidores.
Desde la AFIP comunicaron que «hasta esta reforma, el impuesto se calculaba en base a un porcentaje sobre el precio de venta de los combustibles. Con este cambio en la metodología de cálculo se evitó que el aumento en el precio de los combustibles sea mayor, dado que el impuesto no aumentó a la par del incremento registrado en los últimos meses en el valor final del producto».
EL ACUERDO CON PETROLERAS SIGUE EN PIE
Cuando en la primera quincena de mayo ocurrió el salto cambiario que llevó al dólar a 25 pesos en el mercado mayorista, la cartera que conduce Juan José Aranguren selló un acuerdo con las petroleras YPF, Pan American Energy y Shell Argentina para «congelar» los precios de los combustibles por 60 días. No obstante, dicho acuerdo, vigente hasta el 1° de julio, es ajeno a la fórmula de actualización del impuesto a la comercialización.
El 8 de mayo el ministro Aranguren acordó con las petroleras un congelamiento de precios en los combustibles
Castellano apuntó que «el acuerdo con las petroleras fue para que no suban el precio del producto, pero la cuestión impositiva va por otro carril. Lo que dice el acuerdo es que no se iban a mover los precios hasta el 1° de julio, pero que a partir de esa fecha las empresas quedan liberadas para aplicar un aumento, dividido en seis incrementos mensuales para recuperar lo que dejaron de percibir en esos dos meses».
El directivo de CECC indicó que «el atraso en los precios al público está en el orden del 20%, éste incluye también la variación del precio del biocombustible y es una fórmula un poco más compleja, pero si se toma la evolución del dólar y el aumento del precio del crudo, es aproximadamente ese porcentaje».
Según cálculos actualizados de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (CECHA), el atraso real en el valor de las naftas podría llegar al 30% debido a la devaluación en la Argentina y el ascenso de la cotización internacional del crudo Brent, hoy en USD 78 el barril, cuando en enero se negociaba a 66 dólares.
Por la suba del Impuesto a los Combustibles, el Tesoro recaudará en junio más de $600 millones adicionales. El ITC que carga la venta de naftas y gasoil aporta, en total, unos 10.000 millones de pesos por mes.