Con un gran marco de público, se llevó a cabo por primera vez en el predio del Radio Club (Av. Alem y Chacabuco), la Fiesta Día del Niño organizada por el Grupo “Logramos Sonrisas”, cuya referente es Daiana Furiasse. Aquel grupo que se formó en plena pandemia para brindarse apoyo y asistencia mutua, y que hoy cumple 4 años de fructífera labor.
La organización fue impecable, todos se acercaron para dar una mano, desde los comercios y las empresas hasta quienes dedicaron su tiempo con la animación o con los juegos que los chicos tuvieron a disposición. Hubo inflables, juguitos, golosinas, sorteos, y toda clase de juegos, en un contexto de alegría y la satisfacción de haber podido cumplir con un desafío notable como el de trasladarse a un lugar más amplio y en plena zona céntrica. Y decimos que fue un gran desafío porque la convocatoria fue notablemente superior, y hubo que redoblar los esfuerzos para que los festejos salieran de la mejor manera.
Desde las 14 comenzaron a llegar al predio las familias acompañadas por sus hijos, los auténticos homenajeados para esta ocasión. Ya estaba todo listo para vivir una gran fiesta, con música, artistas en vivo, y mucho colorido. Párrafo aparte merece el stand del equipo de Manu Andújar, donde los chicos pudieron subirse y sacarse fotos a bordo de dos espectaculares motos Honda que el bicampeón del Daka y su gente llevaron hasta el Radio Club.
No nos queda más que felicitar a todos los lobenses que hicieron posible este evento, ya que lo hicieron resignando horas de descanso con sus familias para compartirlo con los hogares humildes, con los vecinos de a pie, con los pequeños que disfrutaron a pleno de una tarde que tenía un mal pronóstico meteorológico pero que, como si fuera un designio divino, se colmó de sol cuando la fiesta estaba en su apogeo y el predio se colmó, ratificando el éxito que augurábamos desde que nos enteramos de la iniciativa. Seguramente habrá aspectos por pulir que quedarán a consideración de los organizadores, pero esta propuesta bien merece ser repetida en 2025, porque si hay algo que no faltó es la presencia de los niños, y –como reza el nombre del grupo- la satisfacción de lograr una sonrisa de parte de ellos, únicos destinatarios de lo que esta movida de todo un barrio brindó con creces y un inobjetable espíritu solidario.