Lobos 24 Un nuevo concepto en información
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En la noche de este viernes, el Diputado Nacional y economista de la UCR, Martín Tetaz, visitó Lobos y brindó una charla, con conferencia de prensa, en el comité local de la calle Cardoner donde fue recibido por sus autoridades. Previamente dialogó con integrantes de la Cámara de Comercio, y brindó su apoyo a la precandidatura a Intendente de Gastón Sandoval. Tetaz habló bastante ante el auditorio, y al cabo de 30 minutos de exponer sobre diversos temas, respondió preguntas de los presentes.
En un momento dado, se refirió a la “soberanía monetaria”, y el periodista de LOBOS 24 lo consultó sobre esa cuestión y una posible dolarización. En relación a esto, respondió: “Hablar de soberanía monetaria en un país que no tiene moneda, es como que un pelado se ponga a discutir el color del peine. La dolarización, la convertibilidad con el real, la independencia del Banco Central, son herramientas que no hay que ponerlas en una discusión ideológica. Si uno va a un taller mecánico, no importa si es peronista o radical, porque todos van a encontrar la misma falla en el auto. Si el problema es un tornillo, ambos van a usar un destornillador. Por eso, una cosa son las herramientas, y si fuéramos un país muy vinculado a EE. UU. como es México o El Salvador, sería distinto, porque hay un intercambio constante, más de 2,5 millones de salvadoreños viven en EE. UU. y mandan todos los meses, remesas a su país de origen. Entonces en esos países se hace más palpable que si la economía de Estados Unidos va bien, a ellos también les va bien. Es razonable y casi una obviedad que adopten la misma moneda. Pero a nosotros no nos pasan las mismas cosas que a EE. UU, a nosotros nos impacta el precio de la soja y a ellos no. O la tasa de interés internacional. Por lo tanto, si vamos a ir hacia una moneda que no sea la nuestra, que no es una mala idea, nos conviene pensar en Brasil que es nuestro principal socio comercial. Si a la convertibilidad de los ’90 la hubiéramos tenido con Brasil, nunca hubiera existido un 2001. Ese proceso empezó con la devaluación brasileña de 1999. Quedamos encorsetados en la convertibilidad, y cuando el país vecino devaluó nos fuimos al diablo. Tendríamos que haber elegido mejor con quién anclábamos la moneda”.
Agregó ante la pregunta de nuestro medio, que: “En una supuesta dolarización, la inflación va a bajar rápido, pero tan pronto como de produzca una devaluación en Brasil, vamos a volver a tener consecuencias. Por lo tanto no tiene sentido. Y prácticamente nadie en el Congreso votaría a favor de una dolarización. No va a ocurrir, ni tiene apoyo político. Por eso no tiene mucho sentido discutir sobre algo que no va a pasar. Entonces empecemos a discutir de qué manera lo resuelven otros países, y esencialmente lo que hace falta es un Banco Central independiente, y no somos distintos en ese sentido, no hay un gen argentino como dice la Vicepresidenta. Tenemos un grupo de empresas concentradas como sucede en el resto del Mercosur. De hecho, cuando funcionamos bien y hubo independencia del BCRA luego del “1 a 1”, no tuvimos tanta inflación, desde el 2003 al 2006 aproximadamente. Había una prudencia fiscal mucho más grande, y todo eso hoy no está. Hay que reconstruir eso. Brasil es la séptima economía mundial, y si no podemos hacer un acuerdo con ellos, menos aún lo podríamos hacer con EE. UU. como algunos sugieren, siendo la primera economía mundial”.
Advirtió asimismo que, en la relación con Brasil, “hay asimetrías evidentes, por eso si vamos hacia una convertibilidad, debe tener algo de flexibilidad para no caer en los mismos errores de los ’90. Nosotros somos un país chico en el mundo. Si no caemos en un nacionalismo exacerbado, vamos a poder entenderlo. Es un error autopercibirnos grandes. Por lo cual, si queremos influir y negociar internacionalmente con éxito, no lo podemos hacer solos. Tenemos que reforzar el Mercosur y la identidad regional con un proyecto económico a largo plazo que tenga en contexto a toda la región. De lo contrario no vamos a ir a ninguna parte. Es cierto que a Alfonsín no le fue bien con la inflación, pero fue un visionario porque sentó las bases del Mercosur en 1985, y se terminó de conformar en el ’91. Y el desafío que tenemos como clase política es empezar a mirar construcciones que tengan como objetivo un plazo de 20 años”. El legislador contrapone sus ideas a las de Milei, y aseguró que quiere debatir con el libertario.
«La dolarización es tremendamente atractiva desde el punto de vista comunicacional, un concepto muy simple de transmitir que otorga una ventaja clara a su proponente y que pone en dificultades al resto, porque la gente siempre va a estar más dispuesta a escuchar al que le cuenta cómo va a terminar con la inflación dolarizando, que al agorero que explica por qué no es una buena idea, sin tener una alternativa que «garpa» tanto», había explicado Tetaz en una columna del diario La Nación, y lo reiteró de una forma más o menos similar aquí en Lobos.
Promediando el final de la charla, cuando una señora lo consultó sobre los créditos para viviendas, Tetaz repuso: “Si se desata una hiperinflación, el menor de los problemas va a ser el de los créditos UVA. Va a volar todo por los aires, y sería algo dramático. El problema no es que suba el precio de la ropa, de los alimentos, o de los insumos, porque acá no se puede resolver con políticas comerciales para ayudar a un sector de la economía. Los precios suben sin distinción en un contexto inflacionario, y lo que está pasando con los créditos UVA es que reflejan la inflación generalizada, con los mismos alquileres ha habido un gran incremento, me lo comentaba Gastón, y eso sí es tremendamente dramático. Si los salarios acompañaran, sería distinto desde un punto de vista social, por no mencionar los salarios de los trabajadores informales que están más de 20 puntos retrasados de la economía real. Los sueldos se caen a pedazos, y lo más grave es que en estos meses hasta que el nuevo gobierno asuma se puede deteriorar más la situación. No soy optimista para nada de lo que pueda pasar, pero a su vez tengo que ser responsable y apoyar para que esta gestión termine en las mejores condiciones que les sean posibles. Nosotros no queremos que esto se prenda fuego, a diferencia de otros sectores de la economía y la política. Incluso lo digo por una cuestión de egoísmo, porque si nos toca ser gobierno, vamos a tener que administrar en medio de un verdadero desastre”.
(Producción periodística y fotográfica: Patricio Contrera para LOBOS 24)
