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El martes de esta semana fue detenido el médico pediatra Guillermo Russo, acusado de producir material pornográfico infantil. Pero lo cierto es que su vivienda fue allanada mucho antes: el 22 de noviembre de 2018.
Ese mismo día un grupo de Gendarmería ingresó a la vivienda de Martín Abad, en la localidad de Vicente Casares, que compartía con su madre. Ante la mirada atónita de la mujer –a cuyo nombre estaba el servicio de Internet– se llevaron un CPU, seis memorias internas, seis pendrives, dos notebook, tres netbook, 350 CDs, 39 Diskets y dos routers. Todo ese material fue llevado al Edificio Centinela de Gendarmería para ser analizado.
El allanamiento en Cañuelas se produjo en el marco de la causa Nro. 33.010/2.018 por infracción al artículo 128 párrafo 1° del Código Penal que indica: «Será reprimido con prisión de seis meses a cuatro años el que produjere, financiare, ofreciere, comerciare, publicare, facilitare, divulgare o distribuyere, por cualquier medio, toda representación de un menor de dieciocho (18) años dedicado a actividades sexuales explícitas o toda representación de sus partes genitales con fines predominantemente sexuales».
El mismo día del allanamiento Abad se retiró presuroso de su trabajo, en la planta Ingevial, y desapareció. El 18 de diciembre, tras la denuncia de su familia, se inició una causa por averiguación de paradero en la Fiscalía 2 de la Dra. Norma Pippo.
Nunca se conoció el contenido del material secuestrado en la casa de Abad ni se ordenó su detención ya que apareció ahorcado el 29 de enero, en un monte del camino del 50, a unos 15 kilómetros de su casa.
Su familia aseguró que nunca fue formalmente imputado en la causa y que escapó creyendo que lo buscaban por razones políticas, ya que en su Facebook solía publicar mensajes contra el gobierno nacional.
La fiscalía 1, que intervino en el hallazgo del cadáver, ordenó un cotejo de ADN para determinar su identidad, pero a simple vista era Abad: estaba a metros de su camioneta incendiada, con su reloj, sus documentos y la ropa de Ingevial.
El 4 de abril de este año fueron allanadas otras dos viviendas de Cañuelas, en las calles Florida y 25 de Mayo, en esa oportunidad por una división de la Policía Federal que buscaba material vinculado a pornografía infantil, aunque ese procedimiento fue ordenado por otro juzgado.
(Fuente: Infocañuelas)
