
En diálogo con LOBOS 24, el Juez de Faltas, Silvio Canosa, se refirió a la preocupante disminución de controles para las motos en nuestra ciudad. En tal sentido, explicó en el último mes no hubo ningún secuestro de rodados por escape libre.
“Está claro que los controles dependen de la Dirección de Tránsito, pero sí te puedo decir lo que nosotros recibimos y las estadísticas que manejamos. En octubre no hubo ningún secuestro de motovehículos por utilizar un escape libre, es la primera vez desde que estoy a cargo de Juzgado que sucede algo así. Ello significa que no hay una decisión política para combatir la problemática de los ruidos molestos. A medida que pasa el tiempo cada vez son menos las medidas que se toman desde el Municipio por esta situación. En un mes promedio, era habitual que se realizaran cinco o seis secuestros, y hay una diferencia notable desde el inicio de esta gestión de gobierno. El 2025 va a culminar con un 35 % de actuaciones menos respecto del año pasado. Las cifras reflejan una merma considerable, con valores muy poco razonables para el personal y la cantidad de recursos que tiene el área de Tránsito”, comenzó diciendo Canosa.
“Yo no puedo afirmar si los operativos se realizan o no, por supuesto que he visto a los inspectores en la calle, pero lo cierto es que la cantidad de ingresos en el Juzgado ha sido muy baja. Como dije antes, no hay una decisión política para resolver el tránsito en Lobos, tampoco hay campañas de prevención en las escuelas, lo cual sería muy útil para evitar que haya hechos violentos como los que se pueden advertir cuando los motociclistas circulan eludiendo los controles y no deteniendo la marcha. Las agresiones a los inspectores son una constante que hemos visto en videos que se han viralizado, y la respuesta ante este descontrol tienen que brindarla desde otros estamentos del Estado y no desde los inspectores de tránsito. Es alarmante que no se brinden charlas de seguridad vial destinadas a adolescentes, que son la franja etaria más vulnerable. Hemos tenido que lamentar muchos jóvenes fallecidos por accidentes de tránsito. Los chicos tienen que entender que usar el casco en la moto no es una cuestión de comodidad, y por otra parte, hay que evaluar los riesgos de perseguir a un supuesto infractor en caso que no acceda a detenerse en un puesto de control vehicular. Los protocolos indican que no es recomendable. No es lo mismo seguir que perseguir. Los inspectores, en su mayoría, tienen años de experiencia y capacitación, pero las órdenes que les dan no son correctas, y cuando se equivocan ninguna autoridad da la cara”, subrayó.
En cuanto a los operativos por consumo de alcohol, el entrevistado sostuvo que el Municipio no cuenta con un alcoholímetro en uso, ya que el aparato que está en su poder está vencido desde 2019 y necesita ser para funcionar calibrado correctamente. Por ese motivo, no hay forma de medir si un automovilista supera los valores permitidos. Solamente se hacen análisis de sangre en caso de haberse producido un accidente, para determinar las causas del siniestro. De todos modos, según la legislación provincial, no hay ningún consumo permitido: Circular habiendo bebido cualquier cantidad de alcohol hace al conductor pasible de una infracción. “Con lo que se recauda por una multa, el Municipio podría mandar a reparar el alcoholímetro y comprar 1.000 pipetas descartables, esto lo puedo afirmar porque yo mismo me contacté con una empresa para pedirle un presupuesto y enviarlo a las autoridades, pero como se imaginarán, no obtuve respuesta”, denunció el Juez.
“Tenemos que entender que está en juego la salubridad pública, es lo mismo que sucede con los ruidos molestos que producen las motos. Hay muchas personas que padecen alguna discapacidad y que esas explosiones les provocan un daño, ni hablar de aquellos vecinos que ven interrumpido su descanso. Llama la atención la ausencia total de controles en la Chicana, que es un predio donde tiene jurisdicción el Municipio. No pertenece ni a la Provincia ni a la Nación. No es seguro que los chicos sigan frecuentando ese lugar como si nada pasara. El asfalto está cada vez más deteriorado y lleno de pozos. Podemos evaluar si conviene o no destinar un predio para hacer un circuito o un picódromo, pero la discusión que debe darse es mucho más amplia. Hay ciudades que lo han implementado, ha mejorado un poco la situación. Y desde ese punto de vista, sería una forma de sacar de circulación de la vía pública y establecer una regulación de la actividad, porque si no hay reglas no tiene sentido pensar en algo así. Debería hacer como en el Autódromo de Buenos Aires, donde se corren picadas, pero garantizando la seguridad de los participante”, enfatizó el entrevistado”, enfatizó el entrevistado.
Asimismo, para aquellos vecinos a quienes les hayan retenido el vehículo, el magistrado precisó cómo es el procedimiento para poder recuperarlo del depósito judicial: “Depende del tipo de infracción por el cual se haya producido el secuestro, lo principal es que el propietario tiene que haber cesado en la comisión de esa falta. Puede ser por haber resultado positivo en un control de alcoholemia, o por otras causas, como falta de documentación para circular. En caso de que no haya resuelto su situación, el auto o la moto no puede salir andando desde el depósito, por lo cual tendrá que irlo a buscar con un transporte de acarreo. Con respecto a los reclamos que algunos vecinos hacen por supuestas faltantes cuando van a retirar el vehículo, acá en mi oficina no he recibido muchas quejas de esa índole, es más frecuente que haya problemas por daños. Puede ser que haya denuncias en las redes sociales, pero no es lo que yo recibo acá en el Juzgado”.
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