El Secretario de Seguridad, Julio Rustom, brindó una entrevista a LOBOS 24 para explayarse sobre su área de competencia y brindar precisiones a los interrogantes de los lectores. En primera instancia se refirió a la competencia que tiene el Municipio y a lo que sucede en los barrios cerrados como el Country Club o La Federala.
En tal sentido, sostuvo: “La seguridad pública es potestad y monopolio del Ministerio de Seguridad de la Provincia, y no decimos esto para sacarnos el lazo, porque las responsabilidades que tenemos las hemos cumplido con creces. La prevención y la disuasión son herramientas fundamentales del Ministerio. Y hay un tema muy particular: La Policía no tiene la facultad de salir a prevenir dentro de los barrios privados. Hay un protocolo de funcionamiento, donde la fuerza sí puede acceder en un caso de emergencia que se haya comunicado o hacer una vigilancia perimetral como en los barrios abiertos, pero no prevención. Se entiende que la vigilancia particular sí puede hacer una acción inteligente en tal sentido. Con respecto a esto, hay varios temas que tienen una influencia negativa. En 7 años no hemos recibido un solo efectivo egresado, y ello contribuye a una merma de la capacidad operativa. Que haya más policías, más movilidad, al Municipio le genera una satisfacción, pero quien debe dotar de las herramientas para prevenir es la Provincia. Tenemos un déficit de personal del 40 o 50 %. El servicio mínimo está garantizado, lo que sí es que tenemos una merma en la calidad. En el callejón Dorrego, por ejemplo, hay una torre de monitoreo que la conseguimos hace 6 o 7 años, y sabiendo que estas cosas podían suceder, ese dispositivo está ubicado en un predio que es del Municipio. En ese espacio verde teníamos previsto colocar un contenedor y hacer una cuadrícula policial que se dedicara a la prevención de todos los barrios periféricos que crecieron en forma impresionante por el boom inmobiliario, y hacer de refuerzo para la custodia particular de los barrios cerrados. Como se podrá ver, quedó la torre sola, porque jamás tuvimos la dotación policial ni el Ministerio la asignó. Le digo más, en la Jefatura local teníamos los cuatro caballos para los rondines que eran muy útiles, pero no tenemos jinetes. También hicimos la prevención con motos, que es un elemento muy eficaz, y los dos vehículos que teníamos el Ministerio los sacó. Es decir que todos los servicios que teníamos y que se diagramaron se quedaron sin la logística para que la Policía pudiera cumplir sus funciones. Sin embargo, nosotros logramos se le otorgaran las herramientas jurídicas por convenios celebrados con la Procuración General, como contar con un Operativo Sol en Lobos, que las cámaras estén a disposición de la Policía y de la Justicia; logramos tener una Policía Científica propia para que nos tengan que venir peritos de otra localidad; generamos tres Comisarías para que el Estado llegue con seguridad a los barrios que están creciendo. Contamos con un sistema de monitoreo para las localidades del interior del distrito, como Elvira, Zapiola, etc. Todo eso es responsabilidad del Municipio y se está haciendo, como también reforzar las patrullas comunitarias”. Durante la entrevista, lo que Rustom se esforzó por remarcar son las limitaciones que existen dentro de la jurisdicción municipal y a qué aspectos de la operatividad alcanzan.
Añadió el funcionario que: “Lo que el Municipio no puede hacer es ordenar a la Policía, disponer operativos, órdenes de servicio, auditorías internas, sanción del personal. El vecino contribuye con su dinero para cubrir los dos tercios del gasto funcional de la fuerza. Todas las políticas de seguridad tienen consecuencias a futuro, y como tales no pueden tomarse como un capricho del gobierno de turno. Hoy la gente no lleva una hoja a la Comisaría para que le tomen la denuncia, ni espera dos horas porque no hay una computadora disponible. Otra área que es sí es potestad de la Comuna es contribuir al mantenimiento de los móviles policiales, al combustible y a las reparaciones que sean necesarias. Cuando esta gestión recibió la Sala de Monitoreo, había 8 cámaras que no grababan, y hoy hay 108 cámaras con 24 empleados. También lo que se perdió en su momento es que la Fiscalía Descentralizada de Saladillo no fuera la Fiscalía Descentralizada de Lobos, tendríamos un funcionario judicial con muchas más atribuciones que una Ayudantía Fiscal. Con el color político que tenía Lobos en aquel momento, concordante con el de la Gobernación, no se pudo conseguir. Por eso cuando alegremente se opina del tema, hoy estamos pagando por la falta de responsabilidad política de quienes estuvieron antes (…) Fuimos el primer Municipio en tener el sistema multiagencias 911. Si no hubiéramos gestionado, no hubiéramos presentado los pedidos de informes por la falta de personal y de móviles. En mayo de 2022 vino el Ministro Berni y nos prometió que en 60 días nos mandaba 10 móviles, y nada de eso sucedió. Vinieron en cuentagotas, un año cuatro, otros dos, luego se llevaron algunos patrulleros además de las motos, y no hay que perder de vista que todos los años se jubila personal policial; están de moda las carpetas psiquiátricas, el personal femenino con todo el derecho del mundo pide licencia por maternidad, y todo es una merma. En 6 años apenas se renovó el 20 % de la flota de móviles. Hay algunos que superan los 700.000 kilómetros, y eso deriva en un gasto que sería menos oneroso renovando los vehículos. Yo al Comisario no le digo cómo redactar los partes de prensa ni le digito la forma de trabajar, no obstante todos los hechos que pasan me los están comunicando y yo estoy al tanto de eso”.
“Es importante ser claros para evitar confusión: La investigación de los delitos corresponde al Poder Judicial y a la Fiscalía. Que tengamos el doble de personal y de vehículos redundaría en el doble de prevención y disuasión. Pese a todo, el sistema que nosotros tenemos funciona, al punto tal que se han esclarecido todos los homicidios que hubo en Lobos. Hoy hay una estructura provincial que se tiene que mostrar colaborativa con la municipal, porque hemos tenido delitos en la zona céntrica por parte de gente que ya estuvo detenida. La Justicia se convierte en una puerta giratoria y desde el Ministerio no comprenden la necesidad de logística que estamos teniendo. Lo que estamos reclamando es que nos brinden las posibilidades para mejorar en la prevención de los ilícitos. Casi todos los jóvenes que se anotaron para cursar la carrera de Policía están ejerciendo la profesión en otras localidades. Desde que asumió la actual gestión provincial, no hemos recibido más personal recientemente egresado, los patrulleros acumulan mucho kilometraje y nos quitaron el Operativo Sol. Eso son algunos datos que permiten entender qué es lo que está haciendo falta para optimizar el servicio. Nosotros cuando estuvo el Ministro Ritondo disponíamos de mayores recursos, no tenga duda de ello”, subrayó el Secretario.