-Se verán beneficiados 1.500 trabajadores, “desde el último operario hasta el jefe de sector”. Fue una conquista del Sindicato Único de Trabajadores del Neumático (SUTNA) que se incorporó al Convenio Colectivo de Trabajo en 2006. Es la 6ª vez que se paga este bono extraordinario.-
La conocida fábrica de neumáticos Bridgestone, con sede en Llavallol (partido de Lomas de Zamora), comunicó a sus 1.500 trabajadores que recibirán este mes, en concepto de “anticipo de participación en las ganancias” de la compañía, un importe de $ 365.000 mil cada uno y que en mayo próximo se abonaría una suma similar, con lo cual este año cada trabajador recibiría unos $ 730.000 a través de un bono extraordinario.
“Si bien los últimos dos años han sido desafiantes para todas las industrias, gracias a los esfuerzos realizados por cada una de las partes que integran la compañía y a un trabajo articulado con el Gobierno es que estamos anunciando este beneficio para cada uno de los colaboradores que conforman Bridgestone Argentina”, confirmó la firma líder en el mercado de cubiertas de producción nacional. Con las trabas a la importación y el aumento del dólar, es un alivio para el sector, que estaba atravesando una profunda crisis.
Fuentes oficiales de la empresa Bridgestone (ex Firestone) que cuenta con un programa a través del cual brindan “un bono extraordinario no remunerativo de participación en las utilidades ordinarias netas de la empresa”. En este sentido, “cada uno de los integrantes de la compañía participa del 33% del excedente de la ganancia neta ordinaria libre de impuestos que supere el 6% de la facturación anual”.
Pedro Wasiejko, secretario general de la Federación de Trabajadores de la Energía, la Industria, Servicios y Afines (FeTIA-CTA), quien negoció en 2001 la incorporación de esta cláusula única en el país en un acuerdo con la empresa, manifestaron a la prensa que cobrarán el premio unos 1.500 empleados, “desde el último operario hasta el jefe de sector”.
El pasado 13 de diciembre, en la última reunión que mantuvo la mesa nacional de la CTA en la Casa Rosada, Wasiejko le planteó a Alberto Fernández la necesidad de promover este tipo de iniciativas en todas las empresas, para “garantizar la recuperación de los ingresos por parte de los trabajadores”, y el Presidente estuvo “totalmente de acuerdo”, según dijo Wasiejko.
También la empresa determinó que se deben destinar utilidades, en igual porcentaje, al desarrollo del mercado y a la inversión en equipos en el país: “Un tercio lo cobran los trabajadores, el otro tercio se destina a bienes de capital (equipamiento) y el último tercio a mejoras en productividad y calidad de empresa”, detalló Wasiejko.
La cláusula entró en vigencia en la crisis de 2001 y desde entonces “se cobró más de seis veces”. Aquel año, Wasiejko estaba al frente del Sindicato Único de Trabajadores del Neumático (SUTNA) y la empresa necesitaba despedir personal. Además de la negociación de las indemnizaciones, “se planteó que así como se le hacía pagar a los trabajadores el costo de la crisis, éstos debían participar también de las ganancias cuando los tiempos son favorables”.
Luego, en la negociación de 2006, la cláusula se formalizó en el Convenio Colectivo de Trabajo. Actualmente, solamente el sector bancario la replica.