El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió una alerta rojo, naranja y amarillo, que advierte sobre una ola de calor extremo que comenzará a sentirse con mayor intensidad desde el lunes 29 hasta el jueves 1° de febrero. La provincia de Buenos Aires está dentro de las más afectadas por este pronóstico.
En el territorio bonaerense, gran parte del centro y sur del interior de la provincia está bajo alerta amarillo. Con valores máximos que podrían alcanzar los 36 grados. Para la Costa Atlántica, la máxima superará los 31° C. Una proyección similar rige para la zona Metropolitana y la Ciudad de Buenos Aires.
Lobos, asimismo, estará entre las localidades donde el ascenso del termómetro se sentirá con más fuerza.
MÁXIMAS PROYECTADAS PARA LOBOS, DESDE EL LUNES Y HASTA EL VIERNES:
Lunes 29: 35 grados – Martes 30: 39 grados- Miércoles 31: 40 grados- Jueves 1 de febrero: 40 grados.
El viernes 2, aunque persistirá el calor por encima de lo normal con cifras de 39° en promedio, llegaría un alivio transitorio para los lobenses, ya que para la zona se prevén tormentas de variada intensidad, alrededor de la mañana o durante las primeras horas de la tarde (Iremos actualizando esta información en el transcurso de la semana a medida que tengamos mayores precisiones).
CÓMO PREVENIR UN GOLPE DE CALOR
Ante este fenómeno climático, los grupos de mayor riesgo constituyen los bebés, niños y personas mayores de 60 años. La exposición al sol en períodos críticos (de 10 AM a 4 PM) puede provocar un golpe de calor, cuyos síntomas más frecuentes se caracterizan por un fuerte dolor de cabeza, pérdida de la conciencia, aumento extremo de la temperatura corporal, mareos y sequedad en la piel.
Para no caer en este cuadro, los profesionales de la salud sugieren las siguientes recomendaciones:
-Beber de abundante agua (aunque no se tenga sed en el momento) para permitir una hidratación adecuada.
-No exponerse al sol en exceso ni en horas centrales del día.
-Reducir o evitar el consumo de bebidas con cafeína, alcohólicas, o muy azucaradas.
-Evitar comidas abundantes o que contengan un exceso de calorías.
-Ingerir verduras y frutas en vez de comidas abundantes.
-Reducir la actividad física, a menos que sea en lugares cerrados que cuenten con ventilación.
-Usar ropa liviana, holgada y de colores claros.
-Permanecer en espacios donde la luz solar no impacte directamente dentro de la habitación.