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Hace unos días, medios cañuelenses, como el portal colega NacPop, se hicieron eco del reclamo de unos trabajadores del Hospital Dardo Rocha de Uribelarrea, que dirige el profesional lobense Guillermo Sperr, y que fueron calificadas como “irregularidades”.
Para poner en contexto al lector, parte de las notas periodísticas (son dos sobre el mismo tema) dicen lo siguiente:
El despido de dos becarios del Hospital Dardo Rocha sacó a la luz una serie de irregularidades que estarían ocurriendo en la administración del nosocomio.
Luego de la publicación en la que NacPop describió el caso de dos empleados echados por mensajes de WhatsApp, saltaron una serie de llamativas decisiones tomadas por el concejal y director asociado del nosocomio de Uribelarrea, Leonel Fangio.
Ahora se conocieron más procesos desprolijos con becarios provenientes de los centros de vacunación, que debían ser reubicados en el Dardo Rocha. Después de realizar las entrevistas laborales con administrativos del hospital no recibieron indicaciones de cuándo, cómo y dónde realizar sus tareas y fueron dadas de baja de sus becas iniciadas como personal de los vacunatorios de Covid. «Nos dijeron que esperemos hasta que nos digan en qué lugar nos iban a reubicar y al tiempo nos encontramos con que estamos sin trabajo y debiendole más de 100 mil pesos al Ministerio de Salud», señaló un damnificado en contacto con este medio.
En ese sentido, la explicación para la desafectación de las becas se basa es que no cumplieron con las tareas asignadas. Incluso se enteraron por mail que contrajeron una deuda con el Ministerio y deberán devolver más de cien mil pesos que les fueron depositados en concepto de haberes (…) Pero lo más llamativo fue el método utilizado para dar a conocer la medida. Fangio les comunicó la mala noticia por WhatsApp. (…) Por recomendación de un entendido en derecho laboral, cuando ambos empleados se presentaron a su jornada de trabajo una empleada administrativa les impidió el ingreso al nosocomio.
En virtud de todo esto, LOBOS 24 se comunicó con el Director, Lic Guillermo Sperr (psicólogo y Licenciado en Enfermería), quien atendió nuestra inquietud y explicó: “Cuando empezó la pandemia, se contrató mucha gente en la Provincia como becarios de vacunación, como así también de logística. Como actualmente se están reduciendo la cantidad de vacunatorios, el Ministerio en lugar de despedir a esta gente la reasignó a otros hospitales dependiendo de la jurisdicción. Es un régimen especial porque tienen 20 horas de trabajo presencial en la planta del nosocomio y 10 horas de capacitación. Todo ello está a cargo del Ministerio en articulación con las direcciones Recursos Humanos de los hospitales. Muchas personas que estaban en el Dardo Rocha son de Máximo Paz, otras de Cañuelas. Hace 3 meses tuvimos una charla con ellos, para ver si les interesaba continuar, considerando que a muchos no les convenía venir por una cuestión de distancia. A otros no les interesaban las características del Hospital porque es especializado en salud mental, y es muy distinto a atender otro tipo de pacientes”. Cabe recordar que Sperr asumió como Director en agosto de 2020.
Reiteró que “Hace tres meses tuvimos esa charla con ellos, adaptamos los horarios, en lo que respecta a salubridad son 6 horas por día. Pero como te dije antes, como muchos venían de lejos, no queríamos que tuvieran tantas horas de viaje (…) Tratamos de ser contemplativos con todos para que se adaptaran a la dinámica del hospital y para ver si tenían ganas de seguir, eran 10 trabajadores que empezaron en calidad de becarios y dijeron abiertamente que no les interesaba o que tenían otro trabajo. Por lo tanto se les dio la baja de la beca. Otros empezaron a faltar, hacía un mes que no concurrían, tratamos de comunicarnos con ellos de diferentes maneras, nunca nos contestaron, y por ese motivo se procedió a dejarlos cesantes. Una vez que hicimos esto nos llamó su referente político de Cañuelas, presionándonos para volverlos a contratar. Y de 10 personas que quedaron cesantes, otros decidieron armar una movida con algunos medios, los gremios llevaron la inquietud al Ministerio, y les dimos la misma respuesta, que se siguió el mismo procedimiento, lo tomamos como un abandono del puesto de trabajo, porque ni siquiera nos contestaron”.
“Así como estoy hablando con usted, hablo con todos los empleados del hospital”, remarcó Sperr. “Ni siquiera nos dieron un argumento válido, como que tenían un familiar enfermo o algo parecido, que hubiéramos estado dispuestos a contemplar. Hablamos con el resto de los compañeros del Dardo Rocha, muchos de los cuales viajan todos los días desde Máximo Paz hasta Uribelarrea, y claramente era una situación injusta para con ellos. No podemos aceptar que haya gente que cobre un sueldo sin trabajar”, agregó.
“Por qué (los becarios) no volvieron a trabajar, no sabemos, habría que preguntarles a ellos. Fueron contratados específicamente para los vacunatorios y como ahora hay muchos menos, en lugar de echarlos, se les ofreció la posibilidad de reforzar la planta de los hospitales. Y fueron reasignados al Hospital Provincial del distrito. Y el Dardo Rocha es el único nosocomio de carácter provincial en la zona. Ni el Cuenca ni el Marzetti son provinciales. Es decir que tenían que prestar sus funciones dentro de instituciones provinciales”.
Dijo asimismo Sperr que existe un grupo de WhatsApp dentro del área de Recursos Humanos, y los que se dieron por despedidos se borraron de un día para el otro, entonces no podían contactarse con ellos por esa vía.
“Es un grupo minoritario el que está haciendo esta movida, dos personas en concreto sobre un total de 10 que ya dejaron de estar en el hospital porque no les convenía o por otros motivos personales. A todos se les planteó lo mismo desde el principio. No es una cuestión política de ninguna manera, apuntaron contra el vicedirector (Leonel Fangio) y creo que es una operación y una intencionalidad dirigida contra él”.
Tiene razón Sperr en un hecho evidente, y es que de las notas publicadas por medios cañuelenses, en ningún momento se lo nombra a él expresamente, sí lo hacen sobre la figura del Director Asociado. “Creo que es porque yo soy de Lobos y no estoy vinculado para nada con la política de Cañuelas, nadie se comunicó conmigo al respecto, y pienso que eso tiene que ver con lo que dijeron esas dos personas que se consideran afectadas y que pretenden defender una posición”.
“No es que un día cualquiera nos levantamos y se nos ocurrió despedir gente, nada que ver, por eso te repito que mantuvimos una reunión con ellos (los becarios) en su momento”, enfatizó.
Sperr hizo alusión a las fragmentaciones que tiene el FDT en la vecina localidad, y por esa razón cree que se trató de una movida política, pero sobre esta cuestión no vamos a ahondar porque es un problema de los cañuelenses. “El expediente de la baja con estos empleados está en el Ministerio y son ellos (autoridades ministeriales) quienes decidirán. Lo que decida el Ministerio con ellos ya no corre por cuenta nuestra como directivos. Nosotros cumplimos con lo que nos correspondía”, concluyó.
