Lobos 24 Un nuevo concepto en información
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El femicidio de la pequeña Guadalupe Eseiza (quien este sábado 28 hubiera cumplido 11 años), no deja de generar tristeza y angustia en su familia y en toda la sociedad, que no está acostumbrada a este tipo de atrocidades contra una niña. Por tal motivo, la agrupación feminista Marea, liderada con Jaquelina Cerone, descubrió un emotivo mural en homenaje de la niña en la Av. Yrigoyen, que evoca su infancia interrumpida por un criminal sin escrúpulos, y donde se depositaron ofrendas florales. Cerone dijo a la prensa: «Esta inciativa la veníamos pensando hace mucho, y por supuesto que le solicitamos autorización a la familia hace casi un mes y medio. Nosotros los hemos acompañado desde el comienzo, y el humilde aporte que hicimos en esta fecha, ese regalo por un cumpleaños que no pudo ser) ha sido este mural. Sabemos que los papás de Guada, quizás se sintieron decepcionados porque cuando estalló el caso, Lobos se manifestó masivamente, pero fue pasando el tiempo y en más de una ocasión se han sentido abandonados o que se olvidaron de lo que pasó con su hija. Y el hecho de que el acusado esté preso no significa que se haya hecho justicia aún, porque no tiene condena, con el agravante de que era el primo de Guadalupe. Por eso esta familia ha sido destrozada y tiene la incertidumbre desde que se levanta hasta que se acuesta hace casi dos años, pensando si el Fiscal los volverán a llamar para notificarlos de un avance de la causa».
Habló con la prensa Luis Eseiza, padre de «Guada», quien con gran entereza continúa luchando contra una Justicia lenta e inoperante. El acusado, Sergio Oliveira, está preso en la Alcaidía de Melchor Romero pero sin sentencia firme, y se estima que el juicio oral recién podría realizarse en 2025.
«La semana pasada fui a conversar con el Fiscal en relación a la causa, pero este sujeto declaró en la cárcel y nada más. Hasta que no sea condenado no vamos a parar, y lo que pasa con la Justicia es que como no tenemos un apellido conocido en Lobos o en la zona, el femicidio de nuestra hija sigue sin que Oliveira vaya a una cárcel común. Es más, te diría que lo están cuidando, porque está aislado, supuestamente, por temor a que otros presos lo ajusticien. Para nosotros, el «día a día» es una lucha constante, no te lo podría explicar, porque podés estar trabajando o haciendo cualquier cosa, pero el recuerdo de mi hija nunca va a desparecer. Va a permanecer hasta el día que me muera, porque está siempre en mi mente. Decirlo como lo estoy haciendo ahora es una cosa, pero vivirlo, no tiene comparación», dijo el papá de la nena con natural resignación.
