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-Ocurrió a fines de esta semana, a las 5 de la madrugada. El comisario de la seccional informó al respecto. A metros del lugar, un emprendimiento también fue robado.-
Una de las víctimas fue golpeada porque no despertaba. Los delincuentes huyeron también con el automóvil de una persona que estaba de visita. Hacía alrededor de dos años que no se cometía un ilícito de este tipo en jurisdicción de la Policía de la vecina localidad. Por ese motivo, el accionar este «grupo comando» generó miedo y conmoción en toda la zona.
El hecho ocurrió en un establecimiento agropecuario dedicado al cultivo de verduras en el km 136,500 de la Ruta Nacional 205, a unos 600 metros de la bajada a La Paz. Unos 6 mayores y dos menores, fueron sorprendidos por una banda de 4 delincuentes, según lo denunciado por las víctimas.
Armados y todos con el rostro cubierto, redujeron a la familia y unos amigos que estaban de visita. Una de las personas fue despertada por un golpe, revistiendo un corte superficial en la frente. Todos fueron maniatados.
Los delincuentes, con una violencia inusitada, les pidieron una suma de dinero que no poseían, por lo cual lo único que pudieron llevarse es el dinero de cambio de una caja registradora, elementos varios, mercadería, el efectivo que traía uno de los amigos que estaba de visita, un automóvil Voyage Verde y los teléfonos celulares.
Minutos después de que los malvivientes abandonaran la finca, los damnificados pudieron soltarse de las ataduras y llegaron hasta la comisaría local.
La investigación policial que está a cargo de Ayudantía fiscal y la comisaria comunal, fue caratulada como Robo Agravado por el uso de Arma de Fuego y en despoblado y banda.
Con el correr de las horas, se conocieron más detalles. A media mañana, una vecina de apellido Bellagamba, se comunicó con el medio colega Roque Pérez Hoy, e informó que, a unos 100 metros del lugar del Robo, los mismos autores, no conformes con el botín que se habían obtenido del atraco anterior, habrían ingresado al puesto de comida que tienen y le sustrajeron elementos de valor para el funcionamiento del emprendimiento gastronómico.
Desde LOBOS 24, podríamos agregar lo siguiente: Todo hace pensar que estos sujetos tenían datos precisos de los moradores del establecimiento rural. Si bien esperaban llevarse más plata, «alguien» les marcó el lugar para irrumpir del modo en que lo hicieron. El modus operandi es muy similar al perpetrado contra la familia Perera. Lamentablemente, no es novedad que en el corredor vial de la Ruta 205, este tipo de delitos se hayan vuelto cada vez más frecuentes.
