Lobos 24 Un nuevo concepto en información
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Con un marco de público aceptable pero que fue menguando considerablemente sobre el final, el martes 1° de marzo se llevó a cabo la “Peatonal Cultural”, organizada por la Dirección de Cultura Municipal en el marco del programa “Encontrarte en Carvanal”. Esto puede atribuirse a diversos factores, siendo los principales: Que era el último día no laborable y mucha gente debía levantarse temprano para cumplir con la jornada de este miércoles; y en segundo lugar, que el comienzo de las clases hizo que aquellos padres que tenían la posibilidad de hacerlo, decidieran acompañar a sus hijos en el primer día del Ciclo Lectivo. La noticia del fallecimiento de Osvaldo Di Santo también hizo dudar a los organizadores sobre la conveniencia o no de continuar con esta movida por una cuestión de respeto, pero finalmente primó la convicción que el deseo del desaparecido docente y artista hubiera sido que “la orquesta siguiera tocando”.
Eliana Cejas, en diálogo con LOBOS 24, sostuvo: “Como es sabido, por razones climáticas tuvimos que reprogramas varias actividades de sábado y domingo, pero insistimos en que un buen lugar era la Laguna, fue una decisión de jerarquizar ese destino turístico para ofrecer una propuesta que contó con artistas locales y otros ya consagrados como Hugo Varela, que nos deleitó con una actuación excelente y tuvo la mejor predisposición con nosotros. Como te mencionaba antes, fue un gran trabajo volver a convocar a los lobenses participantes a raíz de este cambio de fechas, pero la mayoría de ellos supieron entender que era por motivos que iban más allá de nosotros. Si tuviera que decirte hoy cuál fue el resultado final, te diría que estamos más que conformes con lo que hemos podido hacer. Y no queríamos dejar pasar mucho tiempo, porque esto se venía preparando desde hace mucho antes. Haber elegido a la Laguna como locación para el lunes (28/2) fue un éxito, a su vez sabíamos que iba a haber corsos en la Av. Alem, y no queríamos que se superpusiera nada.
El Secretario Pablo Hasper, por su parte, añadió: “Nos propusimos descentralizar muchas actividades culturales, y por ello Villa Logüercio fue uno de los espacios elegidos. Consideramos que merece una mayor atención en ese sentido, por el escenario natural que nos ofrece, la cantidad de visitantes que recibe todos los fines de semana, y el deseo de ser buenos anfitriones. Estos eventos se van a seguir realizando en la medida de lo posible, y más allá del gusto personal de cada uno, priorizamos que los artistas que están detrás de ellos sean de calidad. También fue un impulso importante para los artesanos, dado que a mayor concentración de público, mayor es también la cantidad de posibles clientes. Ha sido muy especial en esta ocasión no sólo por el clima, sino por la pérdida de Osvaldo Di Santo, a quien declaramos Personalidad Destacada de la Cultura el año pasado, un reconocimiento que merecía desde hace años».
«Esto último nos hizo replantear la conveniencia de continuar lo que habíamos previsto o no, se habló mucho sobre eso, somos plenamente conscientes. Pero creo que le hemos brindado el mejor homenaje que estuvo a nuestro alcance. Y hoy, muchos artistas plásticos que se inspiraron y se influenciaron por Osvaldo, también sintieron la necesidad de sumarse porque coincidían con nosotros en que era el mejor tributo que le podíamos hacer. El capital humano que tiene Lobos es enorme, no nos caben dudas de ello”, enfatizó.
Las propuestas, muy interesantes y variadas, se basaron en las artes plásticas, la fotografía, juegos para niños, un sector destinado a las bibliotecas rurales, intervención musical de Federica Citaroni con Gisela Cordera, Pato Casal dibujando en vivo, un gran escenario montado sobre la calle 9 de Julio casi esquina Ayacucho, todas resultaron del agrado de los lobenses, porque de algún modo nos permitieron descubrir a muchos artistas que normalmente uno no iría a ver a un salón, pero sí en un espacio abierto. Las bandas que tocaron en el escenario se destacaron por su profesionalismo y buen gusto, con el rock/pop, algo de jazz, y otros géneros musicales para brindar un abanico amplio de alternativas que resultaran del agrado de los presentes. “La intención fue apuntar a los artistas que, aunque quizás estaban más concentrados en un determinado arte, podían trabajar con otros y de esta manera otorgar múltiples intervenciones. Por no mencionar todos los chicos que integran la Casa de la Música y que nos dieron el sí desde el primer momento cuando los invitamos”.
Los locales gastronómicos ubicados sobre la arteria más céntrica de nuestra ciudad trabajaron muy bien, incluso después de que se diera por concluido el evento, con clientes no sólo de Lobos, sino además ocasionales visitantes que ya se disponían a emprender el regreso hacia sus localidades de origen.
