Tito, el auto eléctrico que Coradir comenzó a fabricar hace algunas semanas en la provincia de San Luis, ya es un hecho concreto. El primer «mosquito» que los transportó a los concesionarios de todo el país inició el recorrido el martes pasado con 10 unidades y ya está disponible para que la gente pueda conocerlo de manera presencial.
Este proyecto que arrancó con la búsqueda de la compañía de un socio automotriz para desarrollar el modelo, y que luego terminaron haciéndolo por su cuenta, finalmente alcanza su objetivo de terminar el año en mano de los clientes, muchos de los cuales ya lo adquirieron por medio de las ventas on line, a u$s11.000, y otros que podrán hacerlo ahora, al verlo exhibido, a un valor de 15.000 dólares.
Según explicó Juan Manuel Bareto, presidente de Coradir, son los primeros automóviles despachados desde la ciudad de San Luis, a todas las agencias autorizadas en diferentes provincias y localidades del país, entre ellas CABA, Buenos Aires, Rio Negro, Chubut, La Pampa, Mendoza, San Luis, Córdoba, Santa Fe, Entre Rios, Catamarca, Tucumán, Misiones. «En pocos días más completaremos las entregas en el resto del territorio para agencias y particulares», aseguró.
Su trayectoria hasta hoy
Tito se presentó en el año pasado y superó todas las expectativas de venta que tenía la empresa, la cual tuvo que aumentar la producción y está preparando una segunda línea de montaje para cumplir con los objetivos. Es un vehículo diseñado para la ciudad, pequeño y liviano, pensado para la movilidad urbana y sustentable. Con capacidad para 4 personas, sus dimensiones son de 2.83 m de largo, 1.50m de ancho y 1.56 de alto.
La potencia de su motor eléctrico asincrónico es de 4.5KW. Posee una batería de litio-ferrofosfato de 2000 ciclos, cuya carga total se completa entre 6 y 8 hs, permitiendo también cargas parciales. Su enchufe de 3 patas planas se coloca en un tomacorriente hogareño (Ficha 2073), como cualquier electrodoméstico.
En cuanto a los frenos, son a disco en las cuatro ruedas, tiene cámara de visión trasera y sensores de estacionamiento con volante multimedia. Además, posee una garantía por 5 años. Una característica distintiva al respecto de otras versiones eléctricas son su chasis de acero y carrocería íntegramente de chapa.
En tecnología, este modelo cuenta con pantalla led táctil de 10 pulgadas, reproductor multimedia, radio, conexión bluetooth con el teléfono, cámara de retroceso, cierre centralizado con mando a distancia, levantavidrios eléctrico, indicador de fallas en tablero digital, calefacción. Y aire acondicionado opcional.
Se presenta como una alternativa económica, simple, ecológica y práctica. Al adquirirlo, no se necesita de ninguna modificación en la instalación eléctrica del hogar, ya que su cargador integrado es compatible con la red eléctrica domiciliaria Argentina.
Tener una auto eléctrico no es un tema común para los argentinos, por eso la recarga de la batería es uno de los temas que más se consulta. En el caso del ahorro, el gasto es 10 a 1 comparado con la nafta, ya que su característica es ser muy económico y ecológico. Recorre en promedio unos 100 km por 8kWh.
Ahora, si la batería inteligente recupera la carga utilizada aunque esta no haya sido completa, es recomendable cargar el vehículo al 100% todas las noches. Por otro lado, si se deja enchufado varios días, el sistema de gestión de la batería monitorea el proceso de carga en todo momento. Una vez que la carga de la batería llega al 100%, el proceso de carga se detiene, incluso si todavía este enchufado.
Lo cierto es que la preventa de Tito fue un éxito, al punto tal que se agotó y tuvieron que impulsar rápidamente la producción de más unidades para cumplir con las entregas a concesionarios. Se producirán unos 300 autos, aunque a este ritmo ya están listos para terminar 2021 con unas 500 unidades. La primera línea será para los modelos que irán destinados a los concesionarios que ya tienen desarrollados o en vías de expansión en todo el país. Luego será el turno de los vehículos de preventa.
«La meta que tenemos es que el 80% de las partes del auto sean de origen nacional. Por ahora lo único que es importado es la estructura de la carrocería y el motor. Pero por ejemplo, el parabrisas ya fue reemplazado por uno nacional», confirmó el Presidente de firma.
Una de las principales preguntas que surgen en torno a Tito tiene que ver con el por qué de su denominación. En este sentido, desde Coradir explicaron que se llama así por «autito, queríamos un nombre simple, simpático, que transmita una imagen de producto nacional, eficiente y ecológico y sobre todo lo vimos en el folleto de una de las pruebas y nos encantó».
(Fuente: Iprofesional)