Lobos 24 Un nuevo concepto en información
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-En una entrevista para LOBOS 24, el Gerente de la Sociedad Rural de Lobos, Fernando Ferrari analizó el escenario que se presenta para el sector, las nuevas tendencias de los consumidores respecto a la carne, y las “reglas de juego” que ha ido adoptando el Gobierno, cuyos resultados no fueron los esperados. Asimismo, cabe destacar que Daniel Semino asumirá el 21 de este mes como nuevo Presidente de la institución, en reemplazo de Francisco Bourdieu-
“Hoy la ganadería está pasando por un momento bastante crítico por la gran incertidumbre que hay en cuanto a las políticas que está implementando el Gobierno. Hasta hace unas semanas estaba cerrado el 50 % de la exportación, que ahora se liberó, hay 7 cortes de carne cerrados hasta fin de año. Y las exportaciones a China, que es nuestro principal comprador, seguirán siendo por cupos. Estamos hablando de venta de vaca de conserva, que como dije varias veces, no se consume acá. Y en cuando al mercado interno, bajó notablemente el consumo de carne vacuna, pero si sumamos todas las carnes, entre ellas la de pollo y cerdo, continuamos con valores similares a los de antes. Esto, obviamente, tiene que ver con una cuestión de precios en los mostradores. Y si el Gobierno pensaba que con esta medida el precio de la carne iba a bajar, es evidente que no fue así. La pérdida de poder adquisitivo de la gente es la principal causa para que el consumo en general no pueda reactivarse”, comenzó explicando Ferrari.
“Argentina sigue siendo el segundo país del mundo que más proteína animal consume, lo que ha cambiado es la ecuación, como te decía antes”. Destacó el profesional que: “En el Partido de Lobos hay alrededor de 165.000 cabezas de ganado, y es el distrito de la zona que predomina en ese sentido, sólo 25 de Mayo tiene más cabezas que nosotros. Hubo un descenso a partir de 2007, pero con el paso del tiempo Lobos se fue recuperando. La cantidad de animales que están en Feed Lot es mínima si lo comparamos con el número total, sí puede ser distinto en otros lugares, de hecho la mayor parte de la haciendo que se vende en los comercios proviene de ahí, un 60 % en promedio. No hay ya tanta hacienda que se alimente con pasturas. Y ahí viene otro problema, porque se estar faenando animales muy livianos, de alrededor de 300 kg., lo cual reduce la capacidad de producción y la oferta existente”.
Reiteró asimismo que “Tenemos muy buenas expectativas respecto al Mercado Agroganadero de Cañuelas, cuya construcción está muy avanzada, y generará muchos puestos de trabajo. La obra es muy buena, tuve oportunidad de visitarla, cuenta con tecnología de punta. Se han tenido en cuenta aspectos como el bienestar animal, tratamiento de efluentes, etc. El impacto que va a tener como mercado concentrador, en el caso de Lobos, será directo si pensamos en que se reducirán los costos de flete. Y para Cañuelas, sin lugar a duda significará un gran progreso, porque alrededor de ese mercado y de los empleos que se vayan creando, seguramente surgirán locales para comer, venta de insumos para los caballos que trabajen en el predio, y mucho más. Pienso que en Lobos al productor le puede servir, a nosotros como institución no sé si nos afectará tanto porque últimamente no se están haciendo muchos remates de hacienda, tenemos dos o tres al año, no más que eso”.
En resumen: Ferrari insiste en su argumento de que el precio de la carne, comparado con otros alimentos, no es caro. No es la primera vez que lo dice, y quizás tenga razón. Pero más acertado está, cuando nos comenta que la pérdida del poder adquisitivo hace que el dinero rinda cada vez menos para todo comprar cualquier tipo de bienes y servicios. A lo cual podríamos agregar las altas tasas de inflación, que los sueldos están “congelados”, y que recién se advierte una tímida recuperación luego de los meses más duros de la pandemia.
