LO QUE AFIRMAN LOS EXPERTOS
Desde que la evidencia de que el coronavirus (SARS-CoV-2) se transmite principalmente por aerosoles fue incuestionable, también se ha tenido que hacer foco en las medidas respecto a la excesiva atención que se le ponía a las superficies, y a personas que adquirieron hábitos obsesivos de limpieza.
La OMS, por ejemplo, afirma que, dado que el virus no puede persistir por mucho tiempo en las superficies ni tampoco replicarse en ellas, “no es necesario desinfectar los materiales de los envases de alimentos, cuando vuelve de hacer las compras, pero hay que lavarse las manos adecuadamente antes y después de manipularlos”. Tampoco es necesario lavar de manera exagerada las frutas y las verduras, basta con lavarlas como se hacía antes de la pandemia de Coronavirus y proceder al lavado de manos.
Por otra parte, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés) recomiendan la limpieza y desinfección de las superficies, como mesas, sólo cuando existe una alta posibilidad de contagio, es decir, “cuando se haya producido un caso sospechoso o confirmado de COVID-19 en las últimas 24 horas”. Es decir, que si un celular, un electrodoméstico, o cualquier mueble está sucio, también deben limpiarse de la misma manera como se hacía antes de la pandemia, excepto el caso ya mencionado.
Sin embargo, son miles los que nunca supieron o creyeron esta información y aún hoy continúan con las prácticas de desinfectar todo, un debate interminable que se replica permanentemente en redes sociales.