-Dos personas fueron aprehendidas y un tercero está prófugo. La investigación se inició gracias a la denuncia de un vecino que detalló los nombres de los principales «dealers». Protección policial y vínculos con un proveedor de la ciudad de Buenos Aires-.
Un impresionante operativo conjunto de varias fuerzas permitió desbaratar una red que desde hace varios años se dedica a la distribución de drogas en la ciudad de Cañuelas.
La investigación se inició hace más de un año gracias a la denuncia de un vecino que aportó los nombres de los cabecillas y “soldaditos” de cada barrio. La causa, que durante varios meses estuvo cajoneada por una presunta cobertura policial, fue reactivada en los últimos meses por el fiscal Lisandro Damonte, que contó con el apoyo de fuerzas policiales externas al partido.
Es así que el domingo 14 de abril entre las 5 de la tarde y las 6 de la mañana unos 120 policías del GAD y del Grupo Halcón al mando del Departamento de Drogas Ilícitas de Presidente Perón que conduce el comisario Inspector Omar Valiente allanaron cinco domicilios de Cañuelas y uno del barrio de Pompeya, en la ciudad de Buenos Aires.
El Comando de Prevención Rural (CPR) de Cañuelas fue la única fuerza local que colaboró en las pesquisas. La Guardia Urbana aportó apoyo logístico en los allanamientos.
El resultado fue la aprehensión de dos personas que en las próximas horas prestarán declaración indagatoria. Un tercer integrante de la banda se encuentra prófugo.
Se secuestraron varias dosis fraccionadas de cocaína y marihuana, una balanza de precisión y una docena de teléfonos móviles que serán peritados para profundizar la pesquisa y determinar los vínculos entre los distintos actores de la trama.
CÓMO SE INICIÓ LA INVESTIGACIÓN
Hace más de un año, durante la gestión del comisario Juan Negrete, un vecino se presentó en la Comisaría local para denunciar a los dos principales cabecillas dedicados a la distribución de drogas en Cañuelas y la red de dealers que tenían en cada barrio del distrito.
La sospecha que tienen los investigadores es que la Comisaría 1ra. “durmió” esa causa o la “extravió” porque la red tenía protección policial. Tanto es así que varios meses después de su declaración inicial en la comisaría el vecino se presentó en la Fiscalía para denunciar que los personajes que había mencionado con lujo de detalles seguían operando con total impunidad.
Fue así que el fiscal Lisandro Damonte le dio nuevo impulso al expediente. Como primera medida convocó al comisario Negrete (que a esa altura ya no se encontraba en Cañuelas). Testigos consultados por este portal afirman que el comisario entregó la denuncia original argumentando que se la había «olvidado en su casa» cuando pidió el traslado.
La apertura de los teléfonos secuestrados y la detención del prófugo seguramente echarán más luz sobre la estructura de la banda.