-Lo impulsa el legislador de Cambiemos Guillermo Castello. Considera una “prebenda” que el 27 de junio no se trabaje-
Hace unos días, exactamente el pasado miércoles, se celebró el Día del Trabajador Estatal. Durante esa jornada permanecieron cerradas las oficinas públicas bonaerenses y tampoco hubo clases en las escuelas estatales.
Se trata de un feriado relativamente reciente ya que comenzó a regir a partir de 2014 luego de que la gestión de Daniel Scioli, a través de una ley, resolviera adherir a una normativa nacional dictada un año antes. Pero, ¿cuál es el motivo del asueto? Un 27 de junio de 1981 la Organización Internacional del Trabajo, a través de los convenios 151 y 154, recomendó a los países miembros de la institución, la discusión paritaria para los trabajadores estatales. Si bien eso ocurrió en el año 1978, es decir, en plena vigencia de la última dictadura militar en nuestro país, los trabajadores del mundo entero tomaron esta sanción como un gran avance en la posibilidad de su reconocimiento. Fue así que surgió esta jornada no laborable.
Pero el nuevo feriado amenaza con desatar una polémica. En rigor, el proyecto que acaba de ingresar a la Cámara de Diputados de la Provincia con la intención de derogarlo, presentado por el legislador de Cambiemos, Guillermo Castello, un dirigente cercano a Elisa Carrió.
“La ley que pretendemos derogar fue dictada en un período en el que el país se vio azotado por un ominoso populismo que concedió graciosamente a diestra y siniestra, beneficios, privilegios y prebendas con total prescindencia de sus costos económicos y sociales”, disparó el diputado en referencia al kirchnerismo.
Al abundar en los fundamentos de su propuesta, Castello señaló que la declaración del Día del Trabajador Estatal “de ninguna manera puede llevar a la concesión graciosa, liviana y superficial de un feriado en el que la comunidad se ve privada del regular funcionamiento del Estado”.
Luego, hace foco sobre la situación del sistema educativo. “Resulta inaceptable no sólo porque los docentes ya cuentan con el feriado del 11 de septiembre, sino porque los establecimientos educativos de gestión privada lógicamente no se encuentran alcanzados por la norma, lo que termina significando que los alumnos de estos últimos tienen más días de clases que los de la educación pública”.
Cabe destacar que en el Estado bonaerense cada ministerio y repartición celebra su día, en el que no se trabaja. Eso ocurre, por ejemplo, en el IOMA el 19 de junio, el 23 de octubre en el caso de Economía y Arba o el 15 de diciembre en el ministerio de Gobierno.
Para Castello, su proyecto busca “ser una contribución a la imperiosa necesidad de remover las injusticias generadas por las prebendas concedidas por un populismo nefasto, en este caso en su faz legislativa, cuyo camino se impone desandar”.