El 28 de febrero, a escasos días del comienzo de las clases en los jardines y primarias de la provincia de Buenos Aires, el gobierno de María Eugenia Vidal recibió a los gremios de docentes para discutir salarios por tercera vez.
La última oferta que se realizó incluía una cláusula de revisión en octubre. Eso implica que en el décimo mes del año las partes se reunirán nuevamente para cotejar las diferencias entre la pauta salarial y el ritmo de los precios. Además dispuso crear una comisión para analizar mecanismos de compensación, explicaron fuentes oficiales a cargo de la negociación.
Los gremios rechazaron la revisión porque pretenden una cláusula gatillo que actualice automáticamente los sueldos. «Si están tan seguros que la inflación es del 15%, ¿por qué no ponen una cláusula gatilo que ajuste automáticamente? No estamos dispuestos a acercar este marco. En tres reuniones recibimos casi la misma propuesta», dijo Roberto Baradel, titular de SUTEBA.
En la primera reunión, el gobierno bonaerense había ofrecido un aumento del 15% en tres tramos sin cláusula gatillo. Asimismo, había anunciado el giro de $4.500 a los 50 mil docentes que no habían faltado en 2017.
Después de la rotunda negativa de los sindicatos, la administración de María Eugenia Vidal mantuvo la oferta, pero agregó un plus de hasta $6.000 por presentismo para 2018. En el nuevo esquema se contemplan ciertas excepciones para quienes se ausenten en casos de embarazo, accidente de trabajo, duelo, donación de órganos o violencia de género.
El nuevo esquema de presentismo que se presentó planteaba también $4.500 para quienes falten hasta cuatro veces por motivos no contemplados y $3.000 a quienes se ausenten hasta en ocho ocasiones. «El control del presentismo es algo que nos ofende» dijo Miguel Díaz, de Udocba, luego de la reunión con autoridades de la Gobernación. UDOCBA fue uno de los primeros gremios en anunciar el paro 48 hs. Y ATE hizo lo propio en representación de los trabajadores auxiliares.
El gobierno bonaerense negocia con cifras de su elaboración sobre la mesa. Según sus relevamientos, el 67% de los docentes pidió al menos una licencia el año pasado, lo cual obligó a la Provincia a afrontar 117.343 suplencias en promedio cada mes con un costo de 19 mil millones de pesos. A su vez, la tasa de ausentismo es del 17% en las escuelas públicas y desciende hasta el 5% en las privadas.
El comienzo de clases está en riesgo, y se espera alto acatamiento al paro. Concretamente, luego de la última reunión con autoridades provinciales, CTERA convocó a un congreso nacional este viernes por la mañana. Allí se decidió realizar un paro el lunes 5 y martes 6; los días estipulados para el comienzo del Ciclo Lectivo en todo el país a excepción de la Ciudad de Buenos Aires, donde arrancaron el 1º de marzo.
(Fuentes: Infobae, Agencia Nova)