Lobos 24 Un nuevo concepto en información
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En diálogo con LOBOS 24, la Ing. Mónica Beccaría, Directora de Obras Sanitarias, comenzó diciendo: “Generalmente, nuestros mayores problemas tienen que ver con que se corte el suministro de agua corriente, porque afecta al común de los vecinos. Muchas veces, esto se produce porque no tenemos una cisterna o un tanque de reserva para el agua, sino que la misma se extrae de los pozos y se envía en forma directa. El tanque de elevación que tenemos y que todos conocemos, tiene como función bajar la presión de este vital elemento, y dosificar el cloro. Por eso, se pasa del bombeo al tanque con una velocidad muy rápida, y en 10 o 15 minutos, el agua que está en el tanque se termina. Dicho tanque se llena unas 16 veces por día. Por ello, cada vez que se corta la luz, ya no hay agua en la red, y a su vez por dicho motivo es recomendable que todos tengan en sus domicilios un tanque de reserva o cisterna, según la altura de la vivienda. La altura máxima que nosotros garantizamos (respecto de la ubicación del tanque en el hogar) es de 4 metros, con lo cual sería bueno que todo el mundo tenga una cisterna baja donde el agua llegue y con una bomba se eleve al piso superior”.
Añadió que: “Sabemos que es costoso ese procedimiento, de cualquier manera el agua es muy barata, basta con comparar cuánto vale en el supermercado una botella de agua mineral. Es casi el mismo valor de 1.000 litros de agua que nosotros proveemos. Podemos abastecer de agua en cantidad y calidad, si bien es sabido que tiene un contenido de arsénico que supera un poco el límite permitido, no estamos hablando de valores siderales. También es cierto que no nos acostumbramos a usarla para lo que se debe, por ejemplo, no se puede lavar el auto, llenar una pileta de lona, o gastar muchos litros en baldear la vereda. Ni hablar de usar una hidrolavadora que consume muchísimos litros. Lamentablemente, somos hijos del rigor, y hasta que el agua no escasee, no nos vamos a dar cuenta de ese mal uso”.
“Como mencioné antes, lo que hace el Tanque ubicado en la calle Arévalo, en mezclar el agua con cloro (0,5 mg. por litro), y bajar la presión, porque se extrae el agua de un pozo de 50 metros de profundidad que quizás está a 5 o 10 kilómetros. La presión de 8 kg. se baja a 2 kg. para que sea apta para el suministro y no rompa las cañerías. Hay 23 pozos en total, de los cuales todos van al tanque, excepto las que están en el Bº Celeste y Blanco, y las que se ubican en la Plaza del Gaucho. En esos casos tienen un sensor de presión que funciona de forma automática”.
Precisó asimismo que: “Tenemos previsto hacer perforaciones de pozos en Las Chacras, es la mejor agua, pero todo es una cuestión de costos, pero al alejarnos más, más caro es, porque las cañerías de impulsión tienen otra características y las bombas tienen que ser más grandes poder llegar hasta el ejido urbano (…) En el verano 2016/2017 anduvimos muy bien, el agua alcanzó para todos los vecinos, no hubo cortes de luz significativos, pero este verano no ha sido así, lamentablemente. Técnicamente es casi imposible poner grupos electrógenos para abastecer a bombas que son de 15 HP”.
Recordó Mónica que: “Yo ingresé al Municipio en 1987, fue un concurso público que se hizo en la Dirección de Obras y Servicios (actual Maestranza). Tenía a mi cargo el Cementerio, espacios verdes, recolección de residuos, barrido, etc. Y cuando se jubiló el Director de Obras Sanitarias que era Osvaldo Sambartolomeo, entré a ocupar este cargo. Llevo 31 años como empleada municipal, y me falta poco para jubilarme”.
