En una conferencia de prensa en los estudios de Canal 4, la Directora del Hospital, Noelia Romero; el Jefe de Guardia, Dr. Leonardo Cionco; y el Traumatólogo, Dr. Gustavo García Pagliaro, se refirieron al gran costo económico que representan los accidentes “evitables”, lo cual repercute en la calidad de la atención.
Comenzó diciendo la Directora del nosocomio, que : “La atención está limitada. Lamentablemente, el incremento en número es constante, la demanda es demasiada para los recursos humanos que disponemos en el Hospital. No tenemos un guardia de Traumatología las 24 horas, solamente contamos con dos traumatólogos, que ponen la mejor predisposición. Pero la realidad es que son personas, y a veces no se llega a responder como el paciente quiere. Otra situación es que esto desborda a la guardia, que también nos estamos preparando para las Fiestas de fin de año con el alcoholismo y todo lo que ello implica. Estadísticamente, en esta época hay un aumento de ciertas patologías o circunstancias”.
“Por tal motivo, queremos informar la realidad de cómo estamos para aquel que haga uso de la institución, sepa en qué condiciones va a ingresar al Hospital, porque después nos encontramos con descontento, golpes en puerta, quejas. En principio, todo lo que sea vía pública lo va a manejar Trauma y va a ir al Hospital, a veces pasan pocas horas y enseguida me llaman a mí o al doctor para ver la evolución del paciente, y eso lleva un tiempo, hay que dejar que el profesional trabaje, para después hacer una presentación a la familia”.
Explicó que: “Sé que circular en moto con los nenes es comprensible porque para muchas personas es el único medio de transporte que tienen, pero es un riesgo y un peligro que implica la decisión de los padres, y hemos pedido colaboración al Municipio para un mayor control vehicular. Sobre todo los menores de 16 años, porque no tenemos pediatras especialistas en accidentología, ni en neurocirugía infantil”.
El Dr. Leonardo Cionco, añadió: “Los accidentes se van acumulando, y lo principal es la prevención, porque una vez que la persona llega a la Guardia, ya es tarde. Cuando un menor de edad en moto se accidenta, después vienen a quejarse los padres porque si los atiende o no, pero son los progenitores quienes le permitieron hacer uso de la moto”.
Por su parte, el Dr. García Pagliaro precisó: “Hay lesiones de todo tipo: desde simples escoriaciones, caídas, golpes, fracturas, luxaciones, fracturas expuestas, y hasta fallecimientos. Yo hace bastante tiempo que vengo batallando contra esto, en su momento me puse en contacto con el Foro de Seguridad para ver qué medidas podíamos tomar en conjunto. Como Hospital, somos el último eslabón, porque ya el accidente se produjo, y eso significa que fallaron todos los mecanismos previos. Son los mayores quienes deben asumir la responsabilidad por sus hijos en la moto, inculcando el uso del casco, por ejemplo. En los casos que sea necesario, nos ofrecemos voluntariamente a dar charlas en las escuelas, para que sepan qué sucede después de un accidente”.
Comentó García Pagliaro que: “Hace 15 días, un motociclista, profesor de Educación Física, venía de Chacras, con su casco, se le cruzó un perro, se cayó y ello derivó en fractura de clavícula. Eso es un accidente, porque tenía todas las medidas de prevención, en cambio si se puede prevenir no es accidente (…) Tenemos que juntarnos con los concejales, con el Juzgado de Faltas, y tomar medidas ejemplares. Sabemos que la Policía hace controles, pero no son suficientes, porque los realizan en lugares muy visibles, con el patrullero con las luces encendidas, entonces los chicos al ver esto, doblan y toman otra calle, inclusive a contramano. En el caso de los autos, la capacidad máxima de pasajeros debe ser cinco. La semana pasada, en el trayecto de mi casa al Hospital, saqué fotos de lo que ocurre con las motos, en unos minutos había 8 casos de gente que andaba sin casco, o que estacionan el rodado donde se les da la gana (…) Yo puedo dar ejemplos de otros municipios, como Saladillo, donde no ves a una moto sin casco, porque la multa es tan grande que le conviene comprarse uno antes que abonar la infracción”.
Concluyó la Lic. Romero, afirmando que: “Toda esta situación implica un costo para el Hospital que se puede evitar, no es sólo hacerse una placa, sino realizar rehabilitación, controles, que demandan mucho tiempo, y aún así dejan secuelas para el paciente”.