LOBOS 24 entrevistó este jueves a Marta Mastandrea, precandidata a Consejera Escolar en primer lugar, dentro de la boleta de Gastón Sandoval. A modo de síntesis, nos resumió su historial laboral: “Tengo casi 24 años de trayectoria en la docencia, siempre me he desempeñado como bibliotecaria, empecé trabajando en Cañuelas, y dentro de Lobos estuve en la Primaria 6, en la Escuela Agraria, entre tantas otras… y recuerdo, por supuesto, que titularicé mi primer cargo en la Primaria 4. Luego continué en varios establecimientos más, porque como es sabido, se puede pedir el movimiento anual (MAD) hacia otra institución por la misma carga horaria. Actualmente estoy, siempre como bibliotecaria, en el CIE (Centro de Investigación Educativa). Asimismo me desempeño en la Secretaría de Asuntos Docentes, para lo cual tuve que rendir una prueba de selección para acceder como Secretaria de Jefatura”.
En cuanto al hecho de ser parte de la lista, expresó: “Hace más de 10 años que milito activamente en política dentro de la UCR, me lo propusieron las autoridades de ese momento y me entusiasmé, me “enganché”, y sigo así hasta el día de hoy, siendo Tesorera de la Mesa Directiva del partido. Cuando Gastón me invitó a participar de la lista como Consejera Escolar, por supuesto que acepté enseguida, es un desafío y una responsabilidad que me interesaría poder concretar. Mi mamá fue consejera en el ’99, no acostumbro a contar mucho esto, pero sí pienso que uno va siguiendo los pasos de los padres, y también por ese motivo le dije a Gastón que contara conmigo para integrar la lista”.
Ante una pregunta concreta, la entrevistada sostuvo: “Creo que después de que hubo algunas situaciones en el Consejo que trascendieron y que no fueron muy gratas, ya ha habido un cambio en cuanto a sus miembros, me parece lógico que haya una renovación, lo más saludable también. Al ir cambiando la composición de un cuerpo colegiado como es en este caso, se puede advertir el grado de transparencia que se proponen brindar a la sociedad desde el momento que asumen. En la medida que haya gente que actúe de esa manera, creo que esas irregularidades no volverán a ocurrir”.
Añadió Marta, que: “Actualmente se está trabajando en buen camino, esa es mi opinión. No debe ser una tarea sencilla estar en los zapatos de los consejeros que está hoy ahora, por varios factores. Hay poco presupuesto, pero en última instancia no depende de ellos sino de las partidas que reciben de la Provincia para ser administradas. Como te decía antes, cuando se va renovando la composición del consejo, que es de lo que estábamos hablando, cada uno de los que ocupen ese lugar tendrá ganas de dar lo mejor, aportar un envión, un aire fresco. Lo que para mí es clave, es que los consejeros puedan garantizar las condiciones de las escuelas y de las aulas, todo lo vinculado a la infraestructura. Y a ello podemos sumarle el transporte en la zona rural, la limpieza de las estufas cuando se acerca el invierno, la ventilación, y todo el mantenimiento que sea necesario para que los estudiantes estén en condiciones aceptables. Eso permite, por otra parte, que los directivos y docentes se puedan dedicar solamente a la parte pedagógica y no tener que sumarles otro problema. Además hay que destacar el rol fundamental que tienen las Cooperadoras de cada colegio, porque eso facilita la colaboración con las autoridades de cada establecimiento. Los consejeros deben hacer que toda esa gente se sienta acompañada ante cada inquietud que pueda surgir. Si logro ser electa como consejera, también será para mí un proceso de aprendizaje a una nueva función, como supongo que lo ha sido para todos los que estuvieron antes, pero en mi caso lo fundamental es ponerle ganas y entusiasmo a un proyecto nuevo”.
“Siendo bibliotecaria, te puedo asegurar que dentro de cualquier institución educativa, ese rol significa un apoyo para el docente, para los directores, y desde luego hay que contemplar que no todas las escuelas disponen de la misma cantidad de bibliografía. Cuando estaba en la Escuela 4, por darte un ejemplo, no disponíamos de mucho material, y lo que se hizo fue comprar todo lo que podíamos dentro del presupuesto que había. Cuando estuve en la Secundaria 1 (ex Nacional), había más cantidad de libros, pero siempre el objetivo es fomentar la lectura mediante los textos con los que cuente cada institución. No nos referimos solamente a los libros de estudio, sino también la lectura por placer, por eso durante muchos años organizábamos talleres recreativos con ese objetivo, y también es positivo que las familias de los alumnos les inculquen ese hábito, desde la lectura de un diario, una revista, o lo que fuere”.
“Por otra parte, debemos pensar que aunque en la sociedad actual se lee menos en formato papel, eso no es un impedimento. Vos podés usar el celular o la tablet para leer novelas enteras, noticias, lo que quieras. No es posible imaginar que por tratarse de un celular o el dispositivo que sea, vas a disfrutar esa experiencia si no tenés lectura comprensiva. Esa falta de comprensión es lo que desalienta la lectura, claramente lo veo así, por eso tanto en la escuela como en la casa, hay que contribuir paulatinamente con un granito de arena todos los días, planteando textos que sean de interés para los alumnos, porque si vamos al caso, cuando un libro te aburre, lo dejás, ya seas niño o adulto. Y si hay un libro o novela que a su vez dio origen a una película, el abordaje que se puede hacer es muy provechoso. Para mí todo el camino recorrido ha sido muy placentero y por eso le he dedicado tantos años”, concluyó Mastandrea, a quien le agradecemos su buena predisposición para poder realizar este breve reportaje.